domingo, 28 de noviembre de 2010

Parasha Miketz

Iosef interpreta el sueño del Faraón

Iosef había pasado doce largos y penosos años en prisión. No sabia si alguna vez volvería a ser liberado, pero Hashem dijo - “No quedarás en cautiverio ni un momento más del que Yo he decretado. Tus años de prisión expiarán tus transgresiones.”

Pasaste diez años en prisión por blasfemar sobre tus diez hermanos.1

Pasaste dos años más en prisión en castigo por haber dicho al escanciador principal: ‘Recuérdame y sácarne de esta prisión’ dos años por dos palabras erradas.2

Al mismo tiempo, los dos últimos años de Iosef en prisión fueron una bendición enmascarada, pues de haberlo mencionado ante el Faraón dos años antes, ¿cual hubiera sido el destino de Iosef?

Si el Faraón lo hubiera liberado, Iosef se hubiera convertido en un intérprete profesional de sueños y así hubiera ganado suficiente dinero para tener una vida acomodada. Pero ahora, dos años más tarde, después de los extraños sueños del rey, ¿qué le ocurrió a Iosef como consecuencia de su interpretación? Fue llevado al poder, convirtiéndose en el virrey egipcio.3

Por dos años consecutivos, el Faraón tuvo sueños extraños cada noche pero no podía recordarlos cuando despertaba. Cuando llegó el momento de liberar a Iosef, el Faraón despertó en la mañana y recordó el sueño claramente.4

La noche del sueño del Faraón era la noche de Rosh Hashaná, cuando Hashem decide la suerte del mundo entero y decreta la escasez o la abundancia para cada país.5

El Faraón soñó que estaba parado al borde del Nilo y veía siete vacas gordas salir del río y pastar en los campos. A continuación, otras siete vacas emergían, más flacas y demacradas que cualquiera que hubiese visto antes. Las siete vacas flacas devoraron a las siete vacas gordas pero siguieron tan demacradas como lo habían estado antes.

El Faraón despertó. Volvió a dormirse y tuvo un segundo sueño similar:

Siete espigas gordas crecieron de un tallo y fueron devoradas por siete espigas flacas y azotadas por el viento.

Luego el Faraón soñó la interpretación de este sueño y no podía recordarla 6

El Faraón despertó muy perturbado porque no pudo recordar el significado de sus sueños. Convocó a sus magos y adivinos y les pidió una explicación.

Todos exclamaron - Su majestad, no hay nada más obvio que la interpretación de su sueño.7

- ¿Cuál es?- preguntó el Faraón.

El primer mago ofreció la siguiente interpretación:

“Las siete vacas gordas representan a siete hijas que nacerán de ti. El hecho que las siete vacas flacas las devoraron simboliza que morirán durante tu vida.8

El Faraón no estaba satisfecho.

Otro intérprete aventuró - Las siete buenas espigas representan a siete reinos que conquistarás. Su suerte en las manos de siete espigas flacas indica que se rebelarán contra ti.9

El rey no estaba contento porque no le parecía que esta interpretación era la que había soñado.’0 Ordenó - Que se proclame en todo Egipto que quien posea la habilidad de interpretar sueños se presente ante mi. Quien eluda esta obligación será condenado a muerte, pero quien revele el significado correcto será generosamente compensado.

Cientos de astrólogos y magos egipcios confluyeron al palacio ofreciendo su sabiduría al rey. Présentaron un sinnúmero de diferentes interpretaciones, pero ninguna de sus explicaciones era aprobada por el Faraón.11

¿Por qué nadie podía pensar en la verdadera interpretación?

Hashem obstruyó la sabiduría de todos los magos y astrólogos del reino, a fin de que Iosef fuera el que ofreciera la verdadera interpretación y se convirtiera en gobernante. Por ello, Hashem hizo que Iosef fuera convocado último después que todos los demás habían ofrecido su interpretación. Si Iosef hubiera interpretado el sueño del Faraón al comienzo, los magos hubieran reclamado - De habernos dado el Faraón la oportunidad, hubieramos dicho exactamente lo mismo.12

Pero ahora la sabiduría de Egipto estaba agotada y el misterio del sueño sin resolver.

Finalmente Hashem hizo que el escanciador principal y jefes de los mayordomos recordara a Iosef, sin embargo, este egipcio desagradecido decidió ocultar del Faraón las habilidades de Iosef. Sólo cuando vio que la intranquilidad del Faraón lo llevaba al borde de la locura decidió, por su propio beneficio, mencionar a Iosef. Razonó - Si este Faraón muere o es depuesto y lo reemplaza un nuevo rey, no estaré seguro que podré retener mí cargo como escanciador real. Por lo tanto, me conviene mencionar a Iosef a fin de restaurar la tranquilidad mental del Faraón.13

El escanciador principal envió el siguiente mensaje al Faraón:

‘Yo pequé frente a dos personas. Una es un hombre llamado Iosef con quien tengo una deuda de gratitud. Pero, cuando me pidió que mencionara su nombre ante ti, no lo hice. La otra eres tú, retuve información acerca de alguien que sabe interpretar sueños’.

‘Una vez el Faraón se enojó mucho conmigo, y con el repostero principal, y nos encarceló. Cierta noche, cada uno de nosotros tuvimos un sueño y ninguno comprendió su significado. Sin embargo, había un hombre en la prisión con nosotros que interpretó cada uno de nuestros sueños correctamente. Era joven (el escanciador principal pensó, mejor enfatizo este punto para evitar que el Faraón lo designe para un alto cargo) y un tonto (mejor me aseguro que el Faraón no lo sobrestime), un esclavo (y, como el Faraón bien sabe, la ley dice que solo un hombre libre puede convertirse en rey) y de la despreciable familia de los hebreos (quienes comen las ovejas que nosotros veneramos y a quienes no soportamos en la mesa, menos aun ocupando cargos importantes). Todo lo que Iosef dijo respecto de nuestros sueños se hizo realidad. 14

En efecto, los sueños del escanciador principal y del repostero principal se hicieron realidad como consecuencia de las palabras de Iosef, pues el cumplimiento de todos los sueños depende de la forma en que son interpretados.15

Una vez una mujer fue de R. Eliezer para pedirle que le interprete un sueño. Ella le relató - En mi sueño vi que el cielorraso de mi casa se derrumbaba.

-Esto significa- interpretó R. Eliezer - que darás a luz un hijo varón.

(R. Eliezer interpretó que el desmoronamiento del cielorraso simbolizaba los dolores de parto que son más severos en el caso de un hijo varón que una mujer).

Sus palabras se cumplieron y la mujer tuvo un varon.

Otra vez vino la mujer para averiguar el significado de un sueño, pero cuando buscó a R. Eliezer en el Beit Hamidrash no lo pudo encontrar.

- ¿Donde está vuestro rebe?- le preguntó a los estudiantes.

-No está aquí ahora. Dínos tu sueño y nosotros lo interpretaremos- sugirieron los estudiantes.

-Otra vez vi que mi cielo raso se derrumbaba.

-Esto significa que enterrarás a tu marido- le dijeron.

-¡Ay!- se lamen tó.

Cuando regresó R. Eliezer, aún se escuchaban los lamentos.

-¿Quien era, y qué pasó aquí?- interrogó.

-Una mujer vino a consultarle un sueño y nosotros se lo respondimos- contesta ron sus estudiantes.

-¿Cuál era el sueño y qué le dijeron?- preguntó R. Eliezer

Le repitieron lo que habían dicho.

-Le hicieron perder a su marido- censuró R. Eliezer. - ¿No saben que el resultado de un sueño depende de como se lo interprete? Dice en la Torá que los sueños del escanciador principal y del repostero principal se cumplieron tal cual Iosef los explicó, se hicieron realidad porqué Iosef los había interpretado de esa forma.16

En la terminología de nuestros Sabios, un sueño es ‘una sexta parte de profecía’. Contiene el menor grado de profecía. Hashem trae ese aspecto particular de la profecía que la persona merece acorde con su conducta y teshuvá. Si modifica su conducta, hasta un mal sueño puede cumplirse en forma benéfica.

La primera vez que la mujer tuvo su sueño aterrador, estaba muy asustada e hizo teshuvá. Hashem hizo que se encontrara con

R. Eliezer quien vio el aspecto positivo del sueño y lo interpretó de esa forma. La segunda vez, estaba de buen humor y no hizo teshuvá. Hashem hizo que se encontrara con los estudiantes de R. Eliezer quienes reconocieron la profética maldad contenida en el sueño y se lo mencionaron, haciéndolo realidad.17

El mensajero del rey corrió a la prisión donde Iosef estaba encerrado, e informó a Iosef que debería aparecer ante el Faraón. El escanciador principal afeitó a Iosef.18 quien no se había cortado el pelo desde que salió de la casa de su padre. Desde entonces, se había conducido como un nazir, absteniéndose del vino y dejándose crecer el pelo.19 Sin embargo, ahora se afeitó en honor al rey20 y cambio su ropa.

losef ingresó al palacio y quedó sorprendido ante el esplendor y el lujo en el que el rey egipcio vivía. La corona del Faraón brillaba por sus joyas y su trono estaba hecho en oro, plata y perlas con setenta escalones que lo conducían a él.21

La ley egipcia dictaminaba lo siguiente:

Un noble que tenía una audiencia con el rey se le permitía ascender treinta y un escalones y el rey descendía al trigésimo sexto escalón para ir en su encuentro.

Una persona ordinaria solo podía ascender los tres primeros escalones y debía permanecer parada en el tercer escalón.

Las personas brillantes del reino que podían hablar setenta idiomas tenían derecho a ascender hasta el escalón superior junto al mismo trono.22

Iosef ascendió tres escalones. El rey le dijo Tuve un sueño y nadie sabe como interpretarlo. Sé que sabes interpretar sueños.

- ¿Cómo estas seguro que la interpretación de los otros es incorrecta?- preguntó Iosef.

También se me mostró la interpretación de mi sueño y por ello no puedo ser engañado- contestó el Faraón.23

Lejos de ser vanidoso por el hecho que el Faraón lo convocó especialmente,24 considerándolo un experto en el campo de las irnterpretacíones, losef contestó La interpretación no está en mis manos. D- s le dará al Faraón una respuesta favorable.

El Faraón relató su sueño: “En mi-sueño estaba a la orilla del río y vi a siete vacas ascender del mismo

-Ese no era tu sueño- interrumpió Iosef. - Tú viste siete vacas gordas de buen aspecto.

-Tienes razón- dijo el Faraón. - Quise probarte y ver, si conocías el sueño.25

El Faraón siguió relatando su sueño, pero nuevamente modificó sus detalles al describir al segundo grupo de vacas que salía del río como ‘flacas y malas’ en lugar de ‘mal aspecto y demacradas’. Iosef lo corrigió nuevamente y describió las vacas como realmente lo eran.

-¿Cómo lo sabes?- le preguntó el Faraón. - ¿Estuviste parado detrás de mí cuando lo soñé?26

En efecto, Iosef conocía tanto el sueño como su interpretación a través del ruaj hakodesh.27 Le explicó al Faraón - Hashem le está dando un mensaje al Faraón. Las siete vacas gordas y las siete espigas buenas, ambas significan una misma cosa - Hashem traerá siete años de abundancia a Egipto. Las siete vacas flacas y las siete espigas flacas, ambas tienen la misma explicación - los siete años de abundancia serán seguidos por siete años de hambre. Las vacas flacas se tragaron a las vacas gordas y las espigas flacas devoraron a las espigas gordas como señal’ que el hambre sucederá repentinamente, dominando la tierra con tanta vehemencia que los años de abundancia serán olvidados inmediatamente. Hashem te dio dos sueños para enfatizar que El cumplirá definitivamente con Su decreto y que esto ocurrirá pronto.

Después de haber explicado el sueño, Iosef concluyó - Te aconsejaré cómo salvarte de los años de hambre. Elige a un hombre sabio y comprensivo para hacerse cargo de Egipto. Deben designarse oficiales para recoger una quinta parte de la producción en los años de abundancia28 y almacenarlo en los depósitos del Faraón. Este cereal será guardado para los siete años de escasez para que el país no muera de hambre.

El Faraón estaba muy satisfecho. - Tienes razón- dijo. Decidió designar a Iosef para que se hiciera cargo del almacenamiento de cereales para los años de hambre.

¿Qué lección podemos aprender de este capitulo que describe el ascenso de Iosef como resultado de la interpretación de los sueños del Faraón?

Entre otras cosas, nos enseña que la obtención de riquezas y éxito reside en las manos de Hashem, no en las nuestras. Si El lo desea, un esclavo prisionero puede transformarse de la noche a la mañana en rey; si El lo decreta, un rey es degradado a esclavo. Solo Hashem determina si alguien sera rico o pobre, poderoso o débil, próspero o decadente.29

Iosef es designado Virrey egipcio

El alboroto y la consternación en la corte real fue considerable. Todos los ministros y nobles30 protestaron - ¿Puede ser que un esclavo que fue comprado por veinte piezas de plata y recientemente liberado de la cárcel sea elevado por encima nuestro?31

El Faraón contestó a sus ministros - Este hombre ciertamente no parece un esclavo.32 Parece un hombre libre, hijo de un pueblo grande y noble. ¿Acaso no notan su gracia, su belleza, su refinada personalidad? Es un gobernante centimetro por centímetro.

En efecto, el porte real de Iosef atrajo la atención de todos. Potifar lo había notado y el oficial de la prisión también comentó que Iosef parecía nacido para ser importante.33

Sin embargo los ministros protestaron - No puede ocupar un cargo de autoridad.

El Faraón frunció el ceño. - ¿Por qué no?- preguntó.

- Tú sabes las leyes tan bien como nosotros- contestaron sus ministros. Un rey egipcio o un segundo al mando debe dominar setenta idiomas y Iosef habla únicamente el hebreo en forma fluida.

¿Quien dice eso? Le haré una prueba mañana - decidió el Faraón.34 Durante la noche Iosef tuvo una visión. El ángel de Hashem se le apareció y le dijo - Te enseñaré setenta idiomas. Si bien Iosef los estudió, no podía recordarlos. Hashem le dijo - Ahora te retribuiré por el ktdush Hashem que hiciste al no escuchar a la esposa de Potifar. Añadiré una letra de Mi Nombre Divino al tuyo. Llevarás el nombre de ¡eh osef para que puedas recordar. En cuando Iosef fue renombrado, pudo recordar milagrosamente todo lo que el ángel le había enseñado.35

A la mañana siguiente, el Faraón lo convocó para tomarle una prueba. El rey se dirigió a Iosef en egipcio y Iosef le respondió en el mismo idioma. El Faraón le permitió ascender un escalón más cerca del trono. Se dirigió a él en arameo y Iosef respondió en el mismo idioma. Subió otro escalón. El Faraón le habló en fenicio y Iosef respondió en fenicio, subiendo otro escalón más. El Faraón examinó a losef en los setenta idiomas y Iosef respondió hasta estar parado en la cima justo delante del trono.36

Ahora era el turno de Iosef. Se dirigió al Faraón en hebreo, pero el Faraón no pudo contestar. El Faraón estaba avergonzado.

- Enséñame hebreo- le ordenó a Iosef. Iosef comenzó a instruir al Faraón, pero él no pudo aprender el idioma pues su santidad no podía penetrar en su mente impura.37

El Faraón temió que sus súbditos lo destituirían si tomaran conocimiento de su incapacidad.

-Prométeme que jamás revelarás a nadie que sabes un idioma más que yo- le dijo a Iosef. Iosef hizo una promesa.38

-Ven- dijo el Faraón a sus ministros - si fuera un esclavo, ¿como podría dominar setenta idiomas?39

Todos los ministros comenzaron a cantar alabanzas a Iosef y el Faraón mismo exclamó - Aunque hubiéramos buscado en todo el mundo de una punta a la otra, no hubiéramos encontrado un hombre tan sabio como Iosef sobre quien descansa el espíritu de D-s.40 Volviéndose a Iosef, dijo - No hay nadie tan comprensivo y sabio como tú. Serás designado para dirigir mi casa y todas las necesidades del pueblo serán provistas por ti. Si bien te he nombrado gobernador de Egipto, debes honrarme y respetarme como rey sobre ti.41

El Faraón deslizó el anillo de su dedo y se lo entregó a Iosef como señal de haberlo nombrado virrey.42 Vistió a Iosef en vestimentas de lino fino y lo ornamentó con una cadena de oro.

Iosef se sentó en una carroza especial junto a la del rey43 y cruzo la capital triunfante. Una procesión de mil bateristas y mil trompetistas marcharon detrás de la carroza de Iosef junto con cinco mil hombres quienes hacían malabarismos con las espadas. Flanqueado a su diestra y siniestra por 20.000 nobles del rey. Veinte hombres corrieron frente a él y exclamaron - ¿Han visto al hombre que el Faraón nombró virrey?44 Todos arrodíllense frente a él.45 Quedará a cargo del país. Quien no le obedezca o no se postre ante él morirá.

Hashem dijo: “Iosef todo esto es en tu honor como una retribución mida kenegued mida por tus actos”.

Como pudiste controlar tus propios deseos y te abstuviste de tocaar a la esposa de Potifar, Hashem te otorgó el mandato.

Te negaste a escucharla, y por lo tanto, todo Egipto deberá escuchar tus ordenes.

Dejaste tus vestimentas en sus manos (aunque sabias que. serías objeto de calumnias y burlas); por ello, ahora serás honrado con vestimentas reales.

No inclinaste tu cuello para pecar y por ello será adornado con una cadena de oro.

No caminaste hacia un destino pecaminoso y por ello viajas en carruaje real.

Tus pensamientos permanecieron puros y por lo tanto eres proclamado un hombre sabio.46

Todos los egipcios cayeron de rodillas y exclamaron: ‘Larga vida al rey y larga vida a su virrey.47

El Faraón llamó a Iosef ‘Tzafnat Pan eaj’, ‘Revelador de Asuntos Ocultos’ 48

Todas las niñas y mujeres egipcias, incluyendo aquellas de noble estirpe, paradas sobre las paredes y techos arrojaron sus joyas al carruaje del nuevo protegido del rey, esperando obtener una mirada, pero Iosef, el tzadik no miraba a ninguna.49 El aliento de la muchedumbre no le afectaba, por el contrario elevó la mirada hacia el cielo y rezó - Cuan grande eres Tú, Hashem, que elevas al pobre del polvo y al necesitado de la inmundicia. Feliz es el hombre que confía en Ti.50

El Faraón entregó a Iosef cien esclavos para servirle bajo su mando y envió trabajadores para construirle un palacio maravilloso cuya construcción duró tres años. También construyeron un trono de oro, plata y joyas para Iosef que tenía grabado un cuadro de la tierra de Egipto y el Nilo.51

Iosef se casa y engendra dos hijos

El pueblo egipcio protestó - Un esclavo se ha convertido en nuestro amo.

A fin de apaciguarlos, el Faraón entregó a Osnat, la hija de Potifar, por esposa a Iosef.52 Este acto desvanecía la sospecha acerca de Iosef y su pecado con la esposa de Potifar. De no haber sido así, seguramente Potifar no habría aceptado entregarle a su hija en matrimonio.53

En realidad, Osnat no era hija de Potifar de nacimiento, sino que había sido adoptada por él. Osnat era la hija de la unión de Dina con Sh’jem,54 quien fue expulsada de la casa de Iaakov. Iaakov había atado una leyenda alrededor de su cuello que decía quienes eran sus padres. El texto de la inscripción terminaba con las palabras - Quien se case con esta niña, se casa con uno de la familia de Iaakov. El ángel de Hashem llevó a Osnat a Egipto y fue llevada a la casa de Potifar y criada allí.55

Como retribución por haberse abstenido de pecar con la esposa de Potifar, Iosef fue destinado a casarse con Osnat.56

Como no entabló una relación prohibida con la esposa de Potifar, fue retribuido por Hashem al recibir a su hija en matrimonio legal.57*

Osnat dio a Iosef dos varones antes que comenzaran los años de escasez. Al mayor lo llamó Menashé, diciendo - Hashem hizo que me olvidara de las enseñanzas de Torá.58 (Menashé deriva de nashani/me hizo olvidar). Si bien Iosef repasaba constantemente la Torá que su padre le había enseñado, no pudo recordar la mayoría por el sufrimiento que había padecido:59

Cuando nació su segundo hijo, lo llamó Efraim, que significa -Hashem me hizo fructífero en la tierra de miseria. (Ef raim está relacionado con para/fructífero).

A partir de los nombres que Iosef dio a sus hijos vemos que estaba más interesado en su compromiso espiritual que en las circunstancias materiales. El nombre de su hijo mayor es un triste recordatorio de sus conocimientos de Torá perdidos. Solo después, cuando nombra a su segundo hijo, describe su condición fisica y agradece a Hashem por permitirle multiplicarse.

Los siete años de plenitud seguidos por el hambre

Durante siete años, los egipcios festejaron la abundancia de comida. Independientemente de la cantidad de productos que sacaban de sus depósitos para moler en los molinos, los graneros nunca se vaciaron.60 Todas las casas rebalsaban de comida.

Durante estos años, Iosef acumuló una quinta parte de la producción de Egipto61 y la guardó para los años de hambre.

Al finalizar los siete años de abundancia, la hambruna asoló repentinamente. Mientras la gente estaba aun sentada disfrutando de sus comidas, el pan sobre sus mesas de repente se puso mohoso y no había más comida.62

-Las cosas ocurren tal cual Iosef las presagió- comentaron los egipcios. - Vayamos de Iosef para obtener cereales.63

Fueron de Iosef exigiendo comida.

-Les daré comida con una condición- dijo Iosef. - Primero abandonen su idolatría y digan: Bendito sea Hashem Quien alimenta a todos los seres

-No te haremos caso- exclamaron.64

Cuando los egipcios regresaron nuevamente, Iosef dijo - No les daré pan a menos que se circunciden.65

Los egipcios fueron del Faraón a quejarse.

-Vayan de Iosef- les dijo.66

-Acabamos de volver de allí y él nos exigió cosas increíbles.

-¿Qué les pidió?- preguntó el Faraón.

-No se puede decir. No podemos repetirlo.

Igualmente díganmelo- insistió el Faraón.

-Nos pidió que nos circuncidáramos. ¿No te dijimos que no nombres a este hebreo para que nos gobierne?67

-Tontos- contestó el Faraón. Predijo que los siete años de abundancia serían seguidos por siete años de hambre. ¿Porqué no almacenaron alimentos para dos o tres años?

-Lo hicimos pero todo lo que almacenámos se pudrió.

-¿No les queda un poco de harina?- preguntó el Faraón.

-En cuanto comenzó la hambruna, hasta el pan que estaba sobre la mesa se puso mohoso- los egipcios dijeron al Faraón.68

-Ven que son unos tontos- comentó el Faraón. - Si Iosef posee el poder para decretar que se pudran los productos, quizás tenga el poder para decretar que nos maten a todos. Vayan y hagan lo que él les ordené. Escúchenlo aun siles ordena lastimar vuestra carne.69

Los egipcios no tuvieron otra alternativa que circuncidarse.


¿Cuál era el propósito de Iosef al forzar a los egipcios a circuncidarse?

Todos los actos de Iosef eran preparativos para el exilio egipcio. losef temía que sus descendientes en el exilio abandonaran la mitzvá de brit milá para asimilarse a los egipcios. Por ello ordenó a los egipcios circuncidarse para asegurar que los judíos en el exilio no estuviesen avergonzados de su milá y siguieran cumpliendo con la mítzvá.70

La hambruna no sólo desvastó a Egipto sino también a los países vecinos, Fenicia (noreste de Egipto), Arabia (sudeste de Egipto) y Eretz Canaan Los demás países del mundo también sufrieron por la falta de alimentos.

El hambre pesaba en Egipto. Todos en el país, hasta los miembros de la clase alta, sufrieron los dolores del hambre.72 Los Egipcios sufrían del hambre hasta el extremo que preferian morir que vivir.73 Corrieron de Iosef para obtener cereales y Iosef abrió sus depósitos y les vendió comida.

La legislación de Iosef durante los años de hambruna.

Iosef promulgó nuevas leyes para los años de hambruna:74

La distribución de comida no estará limitada a los egipcios únicamente, sino el cereal será vendido a los necesitados de cualquier país. (Esta era una novedad jamás vista, instituida porque Iosef amó el cumplimiento de jesed (bondad). En tiempos de hambre, todos los reyes anteriores en Egipto acumularon alimentos para sus compatriotas negándose a venderles a extranjeros.)75

Ningún oficial podrá entregar cereal a un esclavo enviado a comprar. El cereal solo puede ser vendido al amo de la casa o a un miembro de la familia.

Nadie puede recibir más que la carga de un asno.

El cereal puede ser adquirido para uso personal o familiar únicamente. Quien comprara el cereal con fines comerciales estará sujeto a la pena de muerte.

La identidad de quien llega al país para comprar cereal debe establecerse y su nombre será registrado y archivado.76

Menashé, hijo de Iosef, será el supervisor de todas las ventas.77

Los egipcios admiraron la discreción y sagacidad con que Iosef distribuía el cereal en forma justa por medio de su nueva legislación. No sabían de las motivaciones totalmente diferentes que llevaban a Iosef a innovar estas leyes.

Iosef estaba seguro que sus hermanos tarde o temprano vendrían a Egipto a comprar cereal y esperaba encontrarlos. Sin embargo, temía que su padre mandara a sus esclavos a hacer la compra en lugar de sus propios hijos. Por ello impartió una ley por la cual no se podían vender alimentos a los esclavos.

Como Iosef quería encontrarse con todos sus hermanos, decretó que no se podia asignar mas que una carga de burro con cereal a cada persona.

A fin de asegurarse de que la familia de Iaakov no se proveería del cereal de otra parte, Iosef ordenó que el cereal no fuese revendido por el comprador.

¿Y cómo se enteraría de la llegada de sus hermanos? Sólo sí quedaban registrados los nombres de todos los extranjeros. Por lo tanto, Iosef apostó en todas las fronteras de Egipto un guarda cuya función era la de registrar el nombre de cada recién llegado asi como el de su padre.78

Cada noche Menashe traía a Iosef una lista de nombres de extranjeros que habian llegado ese día para comprar cereal.79

Los hermanos viajan a Egipto

Gente de todas partes del mundo viajaba a Egipto para comprar cereal.80 Oro, plata y reliquias fluían a los tesoros del país. Iosef los cobraba y ayudaba a que el país prosperara.81


Hashem prometió a Abraham (Bereshit 15:14) “y después de lo cual saldrán (Bnei Israel) con grandes riquezas”. Por lo tanto Hashem hizo que las riquezas de todo el mundo fluyeran a Egipto a fin de cumplir esa promesa.82

El segundo año de hambre,83 laakov dijo a sus hijos: “Nuestra provisión de cereal se está agotando. ¿Por qué causar envidia entre nuestros vecinos, los Bnei Ishmael y Bnei Eisav, fingiendo que tenemos abundancia de comida?84 Escuché que hay abundante cereal en Egipto. Viajen y compren cereal”.

Iaakov utilizó una palabra hebrea poco usual por cereal, “shever” que también significa “esperanza” implicando: “Veo esperanza en Egipto”. Esto era porque Iaakov tenía una vaga noción profética que Iosef estaba en Egipto.85 Sin embargo, le faltaba claridad de percepción para comprender totalmente, su visión pues el ruaj hakodesh partió de él cuando guardó luto por Iosef.86

Desde la venta de Iosef, no había pasado un solo día en que los hermanos no hubieran dicho: “Busquemos a Iosef y regresemoslo con nuestro padre” .87 Ahora agradecieron la oportunidad de viajar a Egipto. Su propósito principal era el de buscar a Iosef y pensaban combinar esta misión con la compra de cereal.88

Iaakov sólo envió a diez de sus hijos a Egipto y no permitió que el menor, Bíníamín los acompañara. Sabía que el Satán está listo para acusar en los momentos de peligro, como durante un viaje, y temía por la vida de Bíníamín.89

Iaakov instruyó a sus hijos - No ingresen a Egipto juntos. Ustedes son díez hombres fuertes y de buen aspecto y la gente puede mirarlos con un mal ojo. Cada uno debe ingresar por una entrada diferente 90

Díez de los hijos de Iaakov viajaron a Egipto, los mismos díez que estuvieron presentes en la venta de Iosef 91 Deberían soportar mucha agonía hasta redimir su pecado de vender a Iosef.

Los hermanos obedecieron la orden de su padre y todos ingresaron por distintas puertas. A la noche, Menashé trajo a Iosef la lista de visitantes. Cuando la examinó, encontró el nombre de “Reuven ben Iaakov”. Ahora examinó todos los registros muy cuidadosamente y encontró a otro “Shimon ben Iaakov”, y a otro “Levi ben Iaakov”, sacar y así descubrió los nombres de los diez hijos de Iaakov.92

Inmediatamente Iosef impartió una orden: “Cierren todos los almacenes del país excepto uno que permanecerá abierto para la compra de alimentos”. Llamó al guardia de ese almacén y le ordenó “Aquí hay una lista de nombres. En cuanto estas personas vengan comprar cereal, arréstalas y tráelas”.93

Pasaron tres días pero los hermanos no fueron llevados cor Iosef. Finalmente Iosef despachó a setenta soldados para rastrear la ciudad. Los encontraron en un barrio de poca reputación donch vivían mujeres vulgares. Los hermanos estaban buscando a Iosef alí porque pensaron: “Nuestro hermano Iosef es de buen aspecto Quizás terminó aquí” 94

losef envió a su hijo Menashé para que informe a sus hermans que eran convocados a presentarse ante el virrey. - Debe haber ur malentendido- pensaron los hermanos. - Piensa que importamos ur producto y dejamos de pagar los impuestos de importación. Aunque fuera esta la sospecha, pronto aclararemos el malentendido probaremos nuestra inocencia para que no hayan problemas posteriores.

Los hermanos marcharon al palacio y fueron llevados ante e virrey egipcio, un hombre de barba vestido en seda y carmín, cor una corona de oro y rodeado de esclavos.96 Iosef reconocio inmediatamente a sus hermanos, pero ellos no lo reconocieron Iosef los conocía de adultos, pero ellos lo recordaban como un jover imberbe, no como un hombre totalmente desarrollado como lo era ahora.97

El interprete, Menashé, el hijo de Iosef,98 permaneció a su ladc para traducir las palabras de sus hermanos al egipcio y las palabras del mandatario al hebreo.

Iosef trata a sus hermanos duramente

Los hermanos de Iosef se postraron frente al virrey egipcio.

Cuando Iosef vio a sus hermanos, su impulso inmediato era tratarlos gentilmente. Sin embargo, el ángel que había informado a Iosef, cerca de Sh’jem de sus verdaderos sentimientos hacía él ahora se paró acusando a los hermanos e hizo que Iosef actuara como un extraño.99

El comportamiento sorprendente de Iosef hacia sus hermanos exige una explicación. ¿Por qué un tzadik de la talla de losef habla tan duramente con sus hermanos y los acusa de ser espias? Más tarde, también separa a Shimón y lo encarcela, devuelve el dinero a sus bolsas, los persigue y los acusa en falso de robo, haciéndolos pensar que Biniamin seria ejecutado por ladrón.

Indudablemente no debemos suponer que losef se estaba vengando de sus hermanos, pues Iosef cumplía con las leyes de la Torá y no podía trasgredir la prohibición: “No vengarás ni guardarás rencor contra los hijos de tu pueblo.” (Vaikra 19:18).

La razón de la extraña conducta de Iosef es que quería ver a sus hermanos perdonados de sus pecados del pasado. Actuó con misericordia hacia sus hermanos, conciente que habían cometido cinco trasgresiones:

Lo odiaron y no hablaron en forma amistosa con él.

Intentaron asesinarlo cuando llegó a Dotan.

Lo arrojaron a la fosa.

Lo vendieron como esclavo.

Entristecieron a su padre Iaakov al hacerle creer que Iosef había sido devorado por un animal salvaje.

Cada aspecto de la conducta de Iosef hacia sus hermanos fue calculado para hacerlos sufrir por cada uno de sus errores, para que sus pecados fuesen redimidos en este mundo. Las acciones de Iosef no fueron inducidas por la malicia o el odio personal, sino dictaminadas en consideración por sus hermanos para exonerarlos de culpa:

Iosef les habló severamente a sus hermanos para que encontraran redención por haberle hablado duramente a él.

Como intentaron matarlo, buscó pretextos para acusarlos.

Lo arrojaron a la fosa y por lo tanto, los arrojó en una prisión.

Como habían secuestrado a Iosef y lo habían vendido, puso el dinero en sus bolsas para poder acusarlos de ladrones.

A cambio de haber entristecido a su padre, Iosef los hizo sufrir acusándolos de haber robado su copa de plata.100

Todas las acusaciones severas que Iosef hizo contra sus hermanos eran para bien de ellos y leshem shamaim para que hicieran teshuvá y así se salvaran del Guehinam (infierno).101

-¿De dónde vienen?- Iosef preguntó a sus hermanos.

-Venimos de la tierra de Canaan para comprar comida-contestaron.

Iosef levantó su copa de plata. - ¿Ven mi copa mágica? Me revela todo- les dijo. La golpeó con su dedo, y continúo - Veo en mi copa mágica que ustedes son espías. Ingresaron por distintas entradas para descubrir los puntos débiles del país.

-No, mi amo, somos inocentes. No somos espias, venimos a comprar cereal. Nuestro padre nos ordenó que ingresáramos separadamente para no despertar el mal de ojo- protestaron los hermanos.

-Si es así, ¿qué buscaban en esa parte de la ciudad de mala reputación?- preguntó Iosef.

-Fuimos en busca de algo que perdimos. Pensamos que podíamos encontrarlo allí.102

-¿Qué tipo de objeto perdido? Mienten. Veo en mi copa que dos de ustedes destruyeron una gran ciudad. Ahora quieren hacer lo mismo con Egipto.’03 También sé que una vez vendieron a vuestro hermano a los árabes.

Los hermanos temblaron - No, mi amo- dijeron - tus sirvientes eran doce hermanos, los hijos de un hombre que vive en Canaan.

-¿Dónde están los otros dos hermanos?

-El menor está con nuestro padre y el otro no está aquí.’04

-¿Dónde está?- cuestionó Iosef.

-Lo vendimos.

-¿Por cuanto?- preguntó Iosef.

-Por cinco selaim

-Si alguien se los vuelve a vender por cinco selaim ¿lo comprarían?- losel quería saber.

-Lo haríamos.

-¿Que pasa si su amo pide diez selaím para regresárselos?­preguntó losef.

-Pagaríamos diez selaim.

-¿Qué pasa si pidiera un rescate de cíen selaim? cuestionó Iosef.

-Lo pagaríamos- dijeron los hermanos.

-Quizás su amo se niega a liberarlo- insistió Iosef.


-Vinimos preparados para eso. Mataremos o seremos matados.

-Eso es lo que digo- dijo Iosef triunfante. - Ustedes vinieron a matar los habitantes de la ciudad.105 Les pediré que prueben la verdad de vuestras afirmaciones. Por ‘la vida del Faraón, no se iran de aquí a menos que vuestro hermano menor venga también.

Cuando Iosef hacía una promesa en falso, lo hacia por la vida del Faraón.106 Los hermanos, que no se habían dado cuenta de que él no valuaba la vida del Faraón, pensaron que había prometido por la vida del Faraón como si fuera su más preciada posesión.107

A partir de la conducta de Iosef, es evidente que a pesar de su posición altiva, se mantuvo fiel a los preceptos de la Torá. No haría una promesa en falso en Nombre de Hashem, porque no quería pronunciar el Nombre Divino en vano.108

Iosef ordenó a sus hermanos - Uno de ustedes vaya a buscar a vuestro hermano menor de la tierra de Canaan, mientras que los otros permanecen aquí en prisión. Así probaremos si dijeron la verdad o no. Por la vida del Faraón, deben ser espías.

Iosef encarceló a sus hermanos por tres días.

Al tercer día, Iosef les dijo - Sí valoran vuestras vidas, hagan lo siguiente: Dejen a un hermano aquí en prisión. Viajen a sus hogares, lleven cereales a vuestras familias hambrientas y regresen con vuestro hermano menor. Así verificaremos sí es verdad lo que dicen y no morirán.

Los hermanos se hablaron entre sí - Todo esto no nos ocurrió por casualidad. Toda esta desgracia ha recaído sobre nosotros porque somos culpables de no haber escuchado a Iosef cuando se arrodilló ante nosotros y nos imploró por su vida.

A partir de su reacción a la desdicha que les sobrevino, es evidente que los hijos de Iaakov eran grandes tzadikim. Cuando se les cruzó el mal, vieron en él el brazo de Hasehm castígándolos.110 Una persona debe reconocer la Mano de Hashem en todos los eventos que le acontecen. No debe atribuir ningún acontecimiento a una coincidencia o casualidad.

Reuven los reprochó diciendo - ¿No les dije: ‘No pequen contra el chico’ y ustedes no me escucharon? Ahora se nos demanda su sangre y la de nuestro anciano padre.112

Como el intérprete (Menashé, el hijo de Iosef) estaba parado entre ellos, los hermanos no se dieron cuenta que Iosef seguía su conversación.

Iosef se alejó y lloró. Luego regresó y les habló severamente.*

Llamó a setenta soldados del Faraón y les dijo - Encontré unos criminales. Arresten a este. Señaló a Shímon.113 Iosef quería separar a Shimon de Levi porque pensó - Si los dos permanecen juntos quizás arrasen con este lugar como lo hicieron en Sh’jem.114

La encarcelación de Shimon era su castigo mida- kenegued­mido por haber arrojado a Iosef a la fosa.115

Cuando los soldados del Faraón se acercaron, Shimon elevó su voz y gritó con semejante fuerza que los soldados egipcios cayeron al suelo aterrados y se rompieron los dientes. Salieron corriendo de la habitación, dejando a Iosef y Menashé solos para que se arreglen con los hermanos. Iosef ordenó a Menashé - íArréstalo! Menashé se levantó, golpeó a Shimon en el cuello y lo ató. Shimon estaba sorprendido. - Este es un golpe de la casa de nuestro padre- dijo a sus hermanos.116

Shímon fue conducido a otro lugar, pero en cuanto salió de la vista de sus hermanos, Iosef ordenó que se lo tratara con consideración. Fue desatado y se le sirvió las mejores comidas y bebidas. Iosef, el tzadik, actuó misericordiosamente hacia Shimon, aún cuando Shimon lo había arrojado a una fosa llena de serpientes y escorpiones.117

Iosef ordenó a la persona encargada de su casa: “Llena los sacos de los hermanos con cereales”. Y añadió en secreto: “Y devuélveles a cada uno su dinero”.

Los hermanos cargaron el cereal que habían comprado sobre sus asnos y partieron acongojados, dejando a Shimon.

Otra sorpresa desagradable los esperaba. Cuando llegaron a su lugar de hospedaje en el camino, Leví abrió su saco118 para alimentar al asno y encontró que el dinero con el que había pagado al virrey fue restituido a su saco. Le dijo a sus hermanos: “Me devolvieron mi dinero. Lo encontré en mi bolsa junto con el cereal”. 119

Hashem designó a Levi para ser el primero en hacer el descubrimiento desagradable del dinero devuelto. Esta fue su compensáción mida kenegued mida, pues fue Levi quien alertó ‘a Shimon (al ver a Iosef acercarse en Dotan): “Cuidado, se acerca el soñador” 120

Los hermanos temblaron cuando se dieron cuenta que se les había devuelto el dinero con el propósito de hacerles nuevas acusaciones.121 - ¿Qué nos ha hecho Hashem?- preguntaron.

Fueron castigados con angustias relacionadas con el dinero como castigo mida kenegued mida por haber aceptado el dinero a cambio de Iosef.122

Los hermanos regresan a Iaakov y le piden que envíe a Biniamin a Egipto

Los hermanos regresaron a la casa de Iaakov. Le relataron a su padre todo lo que les había acontecido y que un virrey egipcio había exigido la presencia de Bíníamin como comprobación de su historia.

Cuando vaciaron sus sacos, descubrieron en sus bolsas los manojos de dinero con los que habían pagado al gobernante, y tuvieron miedo.

Iaakov sospechó que quizás habían vendido a Shimon como lo habían hecho con Iosef123 y les reprochó diciendo - Me han despojado de mis hijos. Iosef no está aquí, Shímon no está aquí y ahora quieren llevarse a Biníamin. Me causan un dolor tras otro.124 Pensé que podría establecer doce tribus.125 ¿Dónde están?

- Padre- contestó Reuven, - entrégame a Biniamín y yo me haré responsable de él. Sí no vuelve contigo a salvo, morirán mis dos hijos.

- Tonto- le contestó Iaakov - ¿qué gano con eso? ¿tus hijos no son mis hijos también?126 Mi hijo Bíníamin no irá con ustedes porque temo que le ocurra una desgracia en el camino y ustedes traigan a mí edad una desdicha que me lleve a la tumba. Me temo que tal vez sea un Decreto Divino que Rajel y sus hijos esten destinados a morir durante una travesía; Rajel murió en el camino y Iosef también encontró su desdicha mientras viajaba.127 Me temo que Bíníamín esta destinado a morir en el camino también.

Iehuda consoló a sus hermanos asegurandoles, - Esperen a que la casa esté pelada de comida. Entonces nuestro padre no hablará igual.128

Cuando consumieron todos los alimentos que habían comprado en Egipto, Iaakov dijo - Regresen nuevamente y compren un poco de cereal.

Jehuda habló y dijo - El hombre nos advirtió, ‘No verán mi semblante a menos que vuestro hermano esté con ustedes Volveremos a ir únicamente si Biniamin viene con nosotros.

- ¿Para qué le mencionaron al gobernante que tienen otro hermano?- les preguntó Iaakov.

- No tiene sentido ocultar nada de él- contestaron sus hijos -porque su conocimiento acerca de nosotros es sorprendente. Nos podía decir hasta de qué madera estaban hechas nuestras cunas. Cuando nos preguntó si teníamos un padre y un hermano, le dijimos que teníamos otro hermano. ¿Acaso podíamos adivinar qué nos diría - ¡Traigan a su hermano!?129

lehuda se levantó y discutió con Iaakov - Si no viajamos a Egipto, todos moriremos de hambre, incluyendo nuestras esposas, hijos y animales. Si llevamos a Biniamin, quizás lo encarcelen. ¿Cuál de las dos alternativas es mejor? ¿No es mejor dejar que Biniamin viaje y correr el riesgo que algo le ocurra, a que todos nosotros enfrentemos la muerte causada por el hambre?’30 Yo me haré personalmente responsable de Biniamin. Si llegara a fallar y no lo pudiera devolver, perderé mí porción en este mundo y en el mundo por venir.131

Iaakov dijo - La razón por la cual Hashem me provocó todas estas ansiedades y temblores por Biniamin deben ser porque yo hice temblar a mi padre cuando me impartió la bendición.132

Después que Iehuda se comprometió por Biniamin, Iaakov lo dejó viajar con él y les instruyó - Lleven un regalo Ql hombre, pongan algunas frutas elegidas de Eretz Israel en vuestras bolsas.133

Lleven el doble de dinero que la primera vez para pagar el nuevo cereal; quizás hubo un aumento en el precio desde la última vez.134 También devuelvan el dinero que fue puesto en vuestras bolsas. Lleven a su hermano Biniamin y regresen con el hombre.

Iaakov luego se sentó para escribir una carta:

‘Al virrey egipcio, el gobernante sabio y poderoso, llamado: ‘Revelador de Secretos Ocultos’ con Usted sea la paz’.

Soy un hombre mayor, cansado de mi diaria congoja por la pérdida de mi hijo Iosef.


Cuando la angustia por el hambre se agudizó en la casa, envíe a mis diez hijos a Egipto para comprar comida. Les ordené que ingresaran por distintas entradas y así no provocar el mal de ojo. También les indique que estuvieran a la expectativa de nuestro hijo perdido Iosef.

¿Cómo pudiste acusarlos de ser espías? He oido acerca de tu sabiduría y conocimientos en la interpretación de sueños. ¿Cómo es que no te diste cuenta que mis hijos son inocentes?

Ahora te envío a mi hijo menor, Biniamin, pero te imploró que lo cuides mucho para que regrese conmigo en paz.

Debes haber escuchado lo que ocurrió con el Faraón y con Avimelej cuando raptaron a Sara. Seguramente sabes como mi abuelo Abraham con solo un puñado de hombres venció un ejército de reyes. También has oído lo que mis hijos Shimon y Levi hicieron a ocho reyes emoritas por su hermana Dina. No dudarán en hacer lo mismo a Egipto, si fuera necesario.

Nuestra fortaleza es la fuerza de D- s. Si Le rezamos, los destruirá a ustedes y a sus hombres. Por ello te imploro que protejas a Biniamin.

¡Qué D- s te conceda éxitos como gobernador! Tu sirviente, Iaakov, hijo de Itzjak, hijo de Abraham, principe de D- -s.135

Le entregó a Jehuda la carta para el gobernador.

- Tienes un regalo, el dinero y a tu hermano. ¿Qué más necesitas?

- Tu tefilá, padre.136

- Que Hashem, el Todopoderoso, te conceda compasión ante el hombre y que Haga regresar a tu otro hermano y a Biniamin.

Sin darse cuenta, Iaakov pronunció palabras proféticas. Verdaderamente Hashem haría regresar a su otro hermano Iosef.137

Iaakov exclamó - Que Hashem no me prive de ningun otro hijo.138 Quiera El, Quien en el futuro abolirá todos los sufrimientos ponga fin a mis angustias.139

Los hermanos regresaron a Egipto e informaron a Iosef de su llegada.

Los hermanos son invitados a cenar con Iosef

Cuando los hermanos entraron a la corte egipcia, Iosef notó que Biniamin se encontraba entre ellos y se sintió feliz.140 Le indicó a su hijo Menashé - Trae a esos hombres al palacio. Prepara una comida porque serán mis huespedes al mediodía.141 Déjalos matar a los animales a ellos mismos y permíteles que personalmente supervisen la extirpación del guid hanashé (nervio ciático).142 Al mismo tiempo, que preparen la comida para mañana, porque mañana será Shabat.143

Iosef, así como sus hermanos, observaba el Shabat antes que la mitzva fuera ordenada, y cuidaba todos los preceptos instituidos en la Torá al igual que lo habían hecho sus padres, Iaakov, Itzjak y Abraham, haciendolo aun en Egipto.144

Cuando los hermanos escucharon que estaban invitados al palacio del virrey, tuvieron miedo. Ningún otro viajante jamás era invitado a la casa del virrey, todos se alojaban en hosterías.145 Esto significa, pensaron, que estaría maqúinando una nueva acusación contra ellos.

Los hermanos trataron el asunto y concluyeron - Debe ser por el dinero que nos fue restituido a nuestras bolsas que somos convocados a su casa. Ahora nos acusará y encontrará un pretexto para esclavizarnos. Fueron a ver al hombre a cargo de la casa de Iosef, quien no era otro que su hijo Menashe, y le hablaron a la entrada del palacio de Iosef.146

- Por favor, amo mio- dijeron - ya vinimos antes para comprar comida. Para nosotros es degradante tener que comprar alimentos de extraños, en nuestro país solíamos mantener a otras personas.147 Cuando regresamos a casa, cada uno de nosotros encontró en su bolso el dinero con el que había pagado el cereal. Hemos traído ese dinero nuevamente junto con más dinero para comprar cereales nuevamente. No sabemos quien puso el dinero en nuestros bolsos.

El hombre les respondió amablemente. - Quédense tranquilos. No teman- dijo. - Yo lo sé y les di ese dinero a propósito.148 Vuestro D- s, el D- s de vuestros padres les ha dado un tesoro.

Los hermanos lo siguieron al palacio de Iosef y Shímon salió a su encuentro. Recibieron una recepción calurosa149 y se les dio agua para refrescarse y alimento para sus animales. Pasaron la mañana preparando el regalo que habían traído, acomodándolo en receptáculos preciosos150 listo para cuando Iosef regresara al mediodía del palacio del Faraón.151

Cuando Iosef regresó a casa, los hermanos le entregaron el regalo y se postraron ante él. Iosef les preguntó acerca de su estado e interrogó - ¿Cómo está vuestro padre y abuelo?152


Respondieron - Todo está pacífico con tu sirviente, nuestro padre, él aún vive. Bajaron sus cabezas y se postraron.153

Como dejaron la pregunta acerca de su abuelo Itzjak sin responder, Iosef dedujo que habla fallecido.154

En efecto, Itzjak había fallecido diez años antes.

Si se formula una pregunta y la respuesta contiene malas noticias , no se debe responder en forma directa sino dando indicios mediante el silencio o mediante una afirmación indirecta.

R. Jia bar Aba encontró un hombre de su pueblo natal en Babel a quien preguntó - ¿Cómo está mi padre?

- Tu madre me indicó que averiguara como estás tú- contestó el hombre.

- Te pregunté acerca de mi padre- dijo R. Jia - y tú respondiste acerca de mi madre.

- Puedo responder acerca del bienestar de los seres vivos, pero no de los muertos- dijo el hombre.’55

Cuando R. Kahana enfermó, los Jajamim enviaron a R. Iehoshua ben R. Iddi para que averiguara acerca del estado de R. Hahan a.

Cuando Rabi Iehoshua llegó, se encontró con que R. Kahana había fallecido. En lugar de anunciar las malas noticias, rasgó sus vestiduras y lloró.

La gente le preguntó - ¿Está muerto?

No fui yo quien di las malas noticias- contestó - lo dijeron ustedes. Me abstuve de anunciarlo acorde con el dictamen (Mishlé 10:18). Quien pronuncia una afirmación mala es un tonto156

lojanan Jakuka fue a visitar las aldeas para averiguar si la cosecha salió bien. Cuando se le preguntó - ¿Esta bueno el tri go?­contestó - La cebada está buena (para no relatar directamente las malas noticias acerca de la pobre cosecha de trigo). Lo corrigieron diciendo ¿Por qué mencionas la cebada que es un alimento animal? Deberías haber dicho La cosecha del año pasado fue buena (implicando que la de este año no fue buena).157

Cuando Iosef miró a Biniamin, se regocijó con su aspecto porque se parecía a su madre Rajel.158

-¿Tienes hijos?- Iosef preguntó a Bíniamin. Si- contestó Biniamin.

¿Cuantos?- preguntó Iosef.

-Tengo diez- dijo Biniamin.

¿Cómo se llaman?- Iosef quiso saber.

La respuesta de Biníamin fue: Bela, Bejer, Ashbeil, Gera, Na’aman, Ají, Rosh, Mupim, Jupím, Ard.

Iosef comentó - Estos son nombres extraños.

-Sabe- explicó Bíniamín Yo tuve un hermano de parte de mi madre. Era muy especial y por eso nombré a mis hijos en su memoria:

Bela: Fue tragado por los extranjeros y no sé donde se encuentra.

Bejer: Fue el primogénito de nuestra madre.

Aji. Fue tomado cautivo.

Guera: Vive en un país extranjero.

Na’aman: Sus actos eran maravillosos.

Ají: Fue mi hermano tanto de padre como de madre.

Rosh: Fue mi líder y estuvo destinado a ser el líder de mis hermanos también.

Mupim: Era física y espiritualmente hermoso. Sabía todas las halajot que mi padre le enseñó de Shem y Eiver.

Jupim: No estuvo en mi casamiento y yo no estuve en el suyo.

Ard: Su cara era como una rosa. El nombre también denota que mi padre dijo: ‘Descenderé enlutado a la tumba por su pérdida’.

Iosef quedó conmovido. - Que D- s sea benevolente contigo, hijo mío- bendijo a Biniamin.159

Iosef salió de la habitación para aliviar su corazón160 y lloró. Luego lavó su cara y, con gran autodominio, reingresó a la habitación para dirigírse a sus hermanos en forma severa.


Iosef siguió actuando como un extraño hacia sus hermanos aun después que le trajeron a Biniarnin. Los estaba probando para ver si se sacrificarían por Biniamin y así redimirían por su indiferencia hacia la angustia de Iosef en el momento de su venta.161

Pongan la mesa- ordenó Iosef - y yo les diré donde sentarse.

Levantó su copa ‘mágica’ de plata y fingió hacer trucos con ella. La olió. - Mi copa me dice- dijo - que Iehuda se sentará en la cabecera. El es un rey y como rey va adelante. Reuven se sentará junto a él por ser el primogénito.162

Iosef los ubicó a todos correctamente en sus lugares, sentando a los hijos de una madre en la misma mesa. Cuando llegó a Biniamin, dijo - Como él y yo no tenemos madre, que se siente a mi lado.163

Los hermanos quedaron sorprendidos. Mientras comían y tomaban junto al mandatario egipcio, sus corazones temblaron porque no entendían qué significaba todo eso.

Los hermanos fueron obligados a consumir su comida con gran ansiedad en retribución mida kenegued mida por haberse sentado a comer después de vender a Iosef 164 Tomaron vino después de haberse abstenido de ingerirlo en los últimos veintidos años en señal de teshuvá (arrepentimiento) por haber vendido a Iosef. Tampoco Iosef había tocado el vino desde que fue vendido, pero ahora él también tomó con ellos.165

Iosef, sentado junto a Biniamin, ordenó que una carta astrológica de la cual se podía adivinar el futuro le fuera traída.

- Escuché que ustedes los hebreos son un pueblo sabio- le dijo a Biniamin. - ¿Conocen la ciencia de la astrología?

- Tu sirviente conoce todas las ciencias que su padre le enseñó­contestó Biniamín.

- Entonces estudia esta carta- dijo Iosef - y fíjate si puedes descubrir el paradero de tu hermano Iosef quien como tú sabes, fue llevado a Egipto.

Bíniamin estudió la carta cuidadosamente. Hizo cálculos, dividió Egipto en cuatro partes y descubrió que su hermano Iosef estaba sentado junto a él. Quedó totalmente sorprendido.

- ¿Qué te sorprende?- le preguntó Iosef.

Esta carta parece indicar que mi hermano Iosef está sentado aquí mismo- contestó Biniamin. Iosef le murmuró - Es verdad, yo soy Iosef tu hermano. Pero no se lo reveles a tus hermanos. Te dejaré ir con ellos y encontraré un pretexto para hacerlos volver a la ciudad.

Te separaré de ellos y veré si están dispuestos o no a sacrificar sus vidas para salvarte. Si te defienden, sabré que se han arrepentido de sus actos pasados y yo me revelaré ante ellos. Pero si permiten que te encarcele, dejándote atrás, entonces no revelaré mí identidad verdadera.166

losef entregó a cada uno de sus hermanos un regalo, pero Biniamin recibió cinco regalos. Le entregaron dos de parte de Iosef, uno de Menashe, uno de Efraim y uno de Osnat, pues Iosef les había revelado que Biniamin era su hermano, hijo de su madre y todos eran muy felices.167

Los hermanos son acusados de robar la copa de Iosef

Los hermanos permanecieron en la casa de losef hasta después de Shabat 168 y a la mañana siguiente, Iosef le ordenó a Menashe secretamente Llena las bolsas de estas personas con cereales. Devuélveles su dinero y esconde mi copa de plata en la bolsa del menor.

losef despidió a sus hermanos temprano en la mañana, en cuanto amaneció.

Una persona debe salir de viaje de mañana, en vez que a la noche. 169

Una vez había un posadero que solía aconsejar a sus huéspedes - Pueden quedarse tranquilos de partir a la noche, yo los acompañaré con un arma cargada. Una vez que los huéspedes estaban en camino, los ladrones salieron del bosque, los atacaron y robaron todas sus pertenencias. El posadero regresó a su hogar junto con sus cómplices, los ladrones, quienes compartieron el botín con él.

Cierta vez R. Meir se alojó en esa posada. En medio de la noche, el posadero se vistió, llamó a R. Meir y le dijo - Levántate y partamos. Yo te acompañare.

- No puedo partir aún- contestó R. Meir porque debo esperar a mi hermano que viene conmigo.

- ¿Dónde está tu hermano? Voy a buscarlo y partiremos juntos- ofreció el posadero.

- Está en el Beit Hakneset- dijo R. Meir.

- ¿Y cómo se llama?- preguntó el posadero.

- Se llama Kitov- contestó R. Meir

El posadero camínó al Beit Hakneset y pasó la noche buscando al hermano de R. Meir, lo llamaba: ‘Kitov, Kitov’. Nadie le respondía.

La mañana siguiente, R. Meir despertó, preparó su asno y quiso partir.

El posadero lo interrogó - ¿Dónde está tu hermano?

- Ya llegó- dijo R. Meir Es la luz del día sobre la cual esta escrito (Bereshit 1:4) “YD- s vio la luz ki tov/que era buena”.170

Cuando los hermanos estaban aún dentro de los limites de la ciudad. Iosef ordenó a Menashe,171 “Corre tras ellos y ordénales que devuelvan mi copa. Diles ¿Por qué pagaron con maldad la bondad? ¿No es esta la copa con la que mi amo hace magia? Ese fue un acto malvado.

Menashe fue tras ellos y habló tal cual Iosef le había indicado. Los hermanos contestaron - ¿Por qué nuestro amo habla así? D- s no permita que hagamos algo así. Devolvimos el dinero que encontramos en las bolsas en Eretz Canaan y ahora piensan que robaremos el oro y la plata de la casa de nuestro amo? Si se encuentra la copa en poder de uno de vuestros sirvientes, morirá y todos seremos esclavos de nuestro amo.

- Tienes razón- contestó Menashe. - Si una persona perteneciente a un grupo roba, todos son responsables por su robo. Pero yo seré generoso con ustedes, solo arrestaré y reclamaré al esclavo entre cuyas pertenencias se encontrará la copa.172

Los hermanos descargaron apresuradamente sus bolsas de los asnos y las abrieron.

Para no despertar sospechas de una acusación fraudulenta, Menashe comenzó a revisar las bolsas de Reuven, el hermano mayor y finalmente llegaron a la bolsa de Biniamin.173 Allí encontraron la copa. Los hermanos gritaron a Biniamin - Ladrón, hijo de una ladrona, hijo de Rajel quien robó los terafim de Laván.

Eso no es verdad- Biniamin les contestó. Ahora son castigados por haber engañado a vuestro padre con una vestimenta bañada en sangre de chivo y por haber vendido a vuestro hermano.174

Las palabras de Biniamin implicaron Yo soy inocente. Hashem los está poniendo a prueba para saber si están preparados para sacrificar vuestras vidas para salvar la mía. Si lo están, el pecado de vender a Iosef será redimido. 175

Los hermanos golpearon a Biniamin duramente, pegándole entre sus hombros.


R. lose dijo Que mi porción se encuentre entre aquellos de quienes se sospecha en falso. Por los golpes que Biniamin soportó sobre sus hombros, se lo llama: “amigo de Hashem” y la Shejiná se posó en la porción de su tribu, como dijo Moshé en su última bendición (Devarim 33:12) “Y a Biniamin dijo, ‘Querido por Hashem, morará en seguridad con El. Extiende Su protección sobre él todo el día y entre sus hombros, El mora”’.176

Los hermanos desgarraron sus vestimentas. Eran ahora castigados por Hashem mida- kenegued- mida por haber obligado a laakov a rasgarse sus vestimentas como consecuencia de haber vendido a Iosef.177

Cada uno cargo su propio asno, pues eran tan fuertes que no necesitaban ayudarse mutuamente para cargar las bolsas.178

Regresaron al palacio de Iosef y cayeron al piso ante él.

Esto era el cumplimiento del sueño de Iosef en el que once estrellas se postrarían ante él.179

A esa hora, Iosef generalmente juzgaba casos judiciales en el palacio del Faraón, pero ese día había permanecido en casa para no avergonzar a sus hermanos en público.180

¿Qué han hecho?- les preguntó. ¿Acaso no saben que una persona importante como yo sabe que ustedes robaron mi copa de plata?181 También se porque la robó Biniamín, para deducir el paradero de su hermano perdido.182

lehuda contestó - ¿Qué le diremos a mi amo? ¿Cómo nos justificaremos? Así como el dinero que encontramos en nuestras bolsas fue una idea tuya, así también esta nueva desgracia emana de ti.183 Somos inocentes del hurto de la copa, pero Hashem nos está castigando ahora por otro pecado que cometimos hace muchos años.184 Aceptamos ser esclavos de nuestro amo junto con nuestro hermano menor en cuyas manos se encontró la copa.

Esta declaración fue dictaminada por Hashem para castigar a los hermanos mida- kenegued- mida por haber vendido a Iosef. Fueron obligados a someterse a la esclavitud porque habían vendido a Iosef como esclavo.185

- Esto no es lo que pienso hacer- contestó Iosef. - El hombre en cuya bolsa se encontró la copa será mi esclavo y los demás regresen con su padre en paz.

Los hermanos habian pecado al vender a Iosef por veinte piezas de plata. Su angustia por la copa de plata fue una redención por haber pecado con plata.186



Al escuchar las palabras severas de Iosef, todos los hermanos se apartaron. Solamente uno enfrentó a Iosef para discutir con él, lehuda, quien dio su palabra por Biniamin.187

Hashem sometió a Jehuda a más angustias que todos los demás hermanos, haciéndolo vocero en defensa de Biniamin. Esto fue mida- kenegued- mida por haber sugerido la venta de Iosef y porque lehuda tenía suficiente influencia para evitar la venta y devolver a Iosef a su padre.188

Fuente: El Midrash Dice – Libro de Bereshit – Editorial Bnei Sholem – Páginas 331 a 360